Medicina Tradicional China

“El Emperador Amarillo dijo:
Por favor maestro, quisiera que me explicara cómo se ha de aplicar la Acupuntura.
Qi Bo contestó:
En la utilización de la Acupuntura, la norma más importante, lo que primero debe hacer el/la médico/a, es regular el Shen, atender al espíritu”.
Huángdì Nèi Jīng 黄帝内经 (Tratado de Medicina Interna del Emperador Amarillo)
Capítulo XVIII. Bao Ming Quan Xing Lun

“El cuerpo primero susurra, luego habla, finalmente chilla”.
Proverbio chino

La Medicina Tradicional China es un compendio completo de técnicas al servicio de la salud. Su origen se sitúa hace más de 2.000 años, época en la que se datan los primeros registros escritos conservados de la misma, aunque presumiblemente existía con anterioridad.

La Medicina Tradicional China está reconocida por la Organización Mundial de Salud y está vigente de forma oficial en numerosos países más allá de la República Democrática China; entre algunos, todos los países vecinos de la misma, Japón, Cuba, Portugal, Suiza o Alemania la ofrecen en su sistema público sanitario en magnífica armonía con la denominada Medicina alopática.

La Medicina Tradicional China no considera el organismo como un conjunto de elementos aislados anatómica ni funcionalmente, ni trabaja separando cuerpo, mente y emociones o desvinculando a la persona de la Naturaleza ni del entorno en el que vive. Aborda los diferentes síntomas de enfermedad, sea cual sea su gravedad o intensidad, desde, por ejemplo, las bases de la Diferenciación de síndromes, la Teoría del Yin-Yang o la de los Cinco Elementos para ayudar a recuperar el equilibrio funcional del cuerpo.

Además, la Medicina Tradicional China ofrece recursos para poder diagnosticar una enfermedad cuando todavía está en una fase inicial en la que aún no se presenta sintomatología fisiológica, pero sí es perceptible a un nivel energético, posibilitando el retorno del equilibrio energético antes de que se presenten los problemas en el cuerpo físico, dándole suma importancia a la prevención, ya que considera que se puede hacer mucho más que “ponerse a fabricar armas cuando se está en plena batalla”, si se ha actuado antes.

Sea cual sea su aplicación es tan impresionante su labor que, siendo una medicina que se originó hace miles de años, puede diagnosticar con éxito y tratar problemas de salud del siglo XI generados por un estilo de vida totalmente diferente de la sociedad campesina en que la se originó.

Es la técnica más extendida y empleada de la Medicina Tradicional China. Consiste en la inserción y manipulación de las agujas desechables de diferentes materiales (acero inoxidable, plata, oro, cobre) en los puntos de acupuntura para regular y restablecer el flujo de Qi (energía) y Xue (sangre) en el organismo, dispersar lo sobrante (deteniendo, por ejemplo, una hemorragia), tonificar la insuficiencia (como por ejemplo, en caso de insomnio) o aunando ambos preceptos (como ocurre en el caso de los sofocos en el climaterio).

Tras la Acupuntura, es uno de los métodos más conocidos de la Medicina Tradicional China. Consiste en aplicar el calor estimulando una serie de puntos o áreas corporales con el fin de tratar desequilibrios o enfermedades y conseguir la recuperación de las funciones energéticas y fisiológicas. El calor se produce utilizando las propiedades terapéuticas de la raíz de la planta Artemisa vulgaris en sus diversas presentaciones (puro, cono, polvo, disco, etc.) sobre puntos y meridianos de energía.

La Fitoterapia china aplica la utilización de las plantas medicinales y sus derivados con finalidad terapéutica ya sea para aliviar o para curar las enfermedades en función de los principios de la Medicina Tradicional China.

Trabajar la alimentación desde un punto de vista energético significa tener en cuenta la relación de la “naturaleza” de cada alimento, así como su sabor y color según los principios de la Medicina Tradicional China. Según éstos, se va más allá de las dietas basados únicamente en los diferentes grupos nutricionales o cantidades de ingesta para incorporar también cómo afecta un alimento concreto al organismo en función de su naturaleza, si lo va a enfriar o calentar, si ralentiza o activa el metabolismo, si es conveniente tomarlo en cualquier época del año y por qué a personas con constituciones diferentes les convienen alimentos de naturaleza diferente.

El Tuina o masaje terapéutico de la Medicina Tradicional China, que comparte los fundamentos energéticos de la misma, actúa sobre meridianos de energía, puntos de acupuntura y principios de tratamiento como desbloqueo, drenaje, descontracturación, estimulación, tonificación o dispersión. Es un masaje suave y energético que se caracteriza por utilizar técnicas como digitopresión, rodamientos, percusiones, estiramientos, movilizaciones articulares, entre otras. Su finalidad en activar y estimular el flujo de Qi (energía) y Xue (sangre), aliviar las dolencias comunes, aumentar la vitalidad del organismo y mejorar la salud en general.

Es un ejercicio físico que conjuga respiración intención y movimiento corporal. Es una de las formas de expresión de los principios terapéuticos de la Medicina Tradicional China y tiene como finalidad desbloquear el cuerpo físico y mental para permitir el libre flujo de Qi (energía) y Xue (sangre) en el organismo, aliviar molestias físicas y preservar la salud.

La técnica con ventosas es uno de los métodos más antiguos de la historia de la medicina. El reputado médico Paracelso afirmaba ¨el dolor que no se puede eliminar, hay que sacar¨ haciendo alusión a las aplicación de las ventosas, para eliminar rápidamente el dolor . Las ventosas son de diferentes materiales (vidrio, bambú, plástico) y emplean diversas modalidades (calor, aguja, ventosa móvil) para estimular la piel e incidir en la circulación de Qi (energía) y Xue (sangre) en un determinado meridiano, su Zangfu (órgano) asociado o área corporal.

La auriculoterapia es como un mapa del cuerpo a escala reducida en el pabellón auricular que refleja las alteraciones fisiológicas. El director de la OMS en 1990, Hiroshi Nakajima, dijo de la auriculoterapia “posiblemente es el microsistema más desarrollado, mejor documentado científicamente, el más práctico y más utilizado”. Con la inserción de agujas o la colocación de semillas o imanes en la zona funcional del pabellón auricular correspondiente, se trabaja el re-equilibrio de la disfunción expresada en el organismo.